Los argentinos que triunfaron como dobles
Los argentinos que triunfaron como dobles
Ellos se fueron del país para hacer su fortuna, hoy regresan para terminar de consagrarse y contar su experiencia en el país del norte.
El primero en llegar fue Tito Cantinetti, ebanista de General Madariaga, saltó a la fama como doble de Richard Gere en Mujer Bonita. Rochard tenía el registro de conducir vencido y la producción para evitar problemas puso a Tito y desde entonces su nuca fue la más renombrada de todo Hollywood.
José Botella, tributario de Boedo, fue doble de bota de Clint Eastwood en El bueno, El malo y el feo. Clint le temía a las alturas y jamás se lo vio bajar del caballo, las cañas altas que llevó puestas siempre fueron las de José.
Algo novedoso fue lo que le pasó a Sebastián Lotito, cubanista, doble de un dibujito animado, el malvado Sid en Toy Story.
Carlitos Gamarra, erudito de Almagro, fue el más importante doble de John Travolta en Pulp fiction, más que nada en la escena del baile en el restaurant. Finalmente, se sumó el más adolescente de todos: Pablo Galindo, paseador de hamsters, fue doble de Robert Pattinson en Crepúsculo.